El Citroën
DS también conocido como Citroën
Tiburón es un vehículo del segmento E producido por el fabricante Citroën
entre los años 1955 y 1975. Diseñado por el italiano Flaminio Bertoni, el DS es
conocido por su diseño futurista y su tecnología innovadora, como por su suspensión
hidroneumática con corrector automático de altura. El DS consiguió avances en estándares
automovilísticos tales como la comodidad de conducción, la seguridad y el
frenado. Durante su producción en masa, que duró 20 años, Citroën vendió 1,5
millones de unidades de este automóvil.
El modelo DS23 era la versión más potente de la
gama, contaba con un motor de cuatro cilindros en línea y 2347cc, desarrollaba
una potencia de 130cv que le permitían una velocidad punta de 183 km/h.
Su vanguardista carrocería de diseño muy avanzado para la época recordaba por su afilado frontal a un tiburón. Esta carrocería demostró que su aspecto era también funcional al conseguir un
coeficiente de penetración aerodinámica muy bajo para la época, con un Cx de solamente 0,36.
Aunque no lo aparenta sus dimensiones son muy generosas, con una longitud superior a un Mercedes W123 por ejemplo. Su longitud es de 4.826mm, anchura máxima
1.791mm, altura 1.426mm y su batalla o distancia entre ejes era enorme, con unos poco usuales 3.124mm, cifra muy elevada incluso para grandes berlinas actuales. El
peso en orden de marcha era de 1.270kg.
En 1968 Robert Opron rediseñó el DS cambiando sus faros redondos por
faros ovalados direccionales. Esta versión del mismo es la más conocida y
emblemática.
El
Citroën
DS fue nombrado el coche más bello de todos los tiempos por la revista Classic & Sports Car tras una encuesta realizada a 20 diseñadores de coches de renombre, entre los que se encontraban Giorgetto Giugiaro, Ian Callum, Roy Axe, Paul Bracq, y Leonardo Fioravanti. También en 1999 quedó tercero en el galardón: “Mejor Coche del Siglo XX”, detrás
del Escarabajo y Mini, primero y segundo respectivamente.
Pero el elemento más innovador que incorporó el
Citroën
DS fue sin duda el sistema de suspensión hidroneumática. El impulsor de este sistema de suspensión fue Andre Lefebvre,
ingeniero aeronaútico e incansable investigador sobre
nuevos materiales y nuevas soluciones de ingeniería. Pero fue, realmente, Paul Magés fue el creador del revolucionario
sistema de suspensión. El conocido como “Profesor”, entró en Citroen con
17 años y siempre se dedicó a la parte de suspensiones. En 1950
encuentra la solución al problema de las vibraciones en los prototipos
basados en aire: se trata de adoptar una combinación de gas y líquido.
Nace así la famosa suspensión hidroneumática de Citroen. Posteriormente se unificó en un sistema hidraúlico la dirección
asistida, los frenos, faros direccionales, suspensión y embrague.